UN CAMINO DE FLORES

Título: Un Camino de Flores

Autores: JonArno Lawson y Sydney Smith

Nº páginas: 32

Editorial: Libros del Zorro Rojo

Seleccionado por The New York Times como uno de los mejores libros infantiles de 2015.

Una niña recoge flores mientras camina de la mano de su padre por una ciudad gris. Cada flor se convierte en un regalo que deja un rastro inequívoco de belleza: un camino de flores. Este libro sin palabras, concebido por el laureado poeta JonArno Lawson e ilustrado por Sydney Smith, es una oda a la importancia de los pequeños gestos, capaces de transformar nuestro entorno.

No he tenido muchas veces entre mis manos libros mudos, sin palabras, solo con dibujos. Quizá de pequeña si, pero de adulta se limita a un par de veces. Pero juro que la sensación que me ha transmitido este libro lo han hecho pocos. Es fácil pensar que un libro sin letras nos será indiferente, es decir, podemos pensar que las ilustraciones son muy bonitas pero es que con este se aprenden muchas cosas solo con seguir la historia de sus dibujos.

Comenzaré comentando que los dibujos son muy muy bonitos, en blanco y negro la mayoría pero con toques de color en ciertas partes donde es necesario centrar la atención y también para entender determinadas cosas que la historia nos quiere transmitir. Os dejo un ejemplo, pero solo uno porque como veis en la ficha tiene muy pocas páginas y poneros más sería destripar lo esencial del libro.

Podéis apreciar la sencillez y la belleza, y todo lo que transmite con un simple ilustración. Porque en esta que os he puesto podemos ver perfectamente la desazón y amargura que transmiten muchas de las personas paradas, esperando a cruzar la carretera. También la manera del padre de pasar de su hija mientras habla por teléfono. Esto solo en una de las ilustraciones, el resto es así, cada una nos transmite una parte de la historia. 

Además de que nos transmite nos enseña que los pequeños actos pueden cambiar un poco la vida de los que nos rodean y ponerle luz a la oscuridad que nos rodea, esa oscuridad que provocamos nosotros mismos estando siempre descontentos con todo.

Me gustan estos libros porque al no tener palabras se presta a que cada cual lo interprete de una manera y es como si cada uno leyéramos un libro diferente. En mi caso me he dado cuenta que con cosas muy pequeñas un día gris se llena de color. 

Además me ha encantado la protagonista, desprende toda esa ternura e inocencia de la infancia que no deberíamos perder. Os recomiendo mucho este libro mudo porque pasaréis un rato muy especial leyéndolo.