EL MAR DE LA TRANQUILIDAD

Título: El mar de la tranquilidad

Autora: Katja Millay

Nºpáginas: 456

Editorial: Neo

ISBN: 978-84-16256-84-6

La antigua prodigio del piano Nastya Kashnikov solo quiere dos cosas: terminar el instituto sin que nadie conozca su pasado y conseguir que el chico que se lo arrebató todo -su identidad, su espíritu, sus ganas de vivir- pague por lo que hizo.
La historia de Josh Bennett no es ningún secreto. Cada persona a la que ha amado ha sido arrancada de su vida, y a los diecisiete años no le queda nadie. Ahora lo único que quiere es estar solo. Y parece que la gente comprende que no necesita compañía. Todos excepto Nastya, la misteriosa chica nueva del instituto, que poco a poco irá acercándose a él. Pero cuanto más llega a conocerla Josh, mayor es el enigma. A medida que su relación se intensifica, las preguntas sin respuesta salen a la luz y él comienza a preguntarse si alguna vez sabrá quién es Nastya en realidad, o incluso si quiere descubrirlo.
El mar de la Tranquilidad es una historia profunda y emotiva sobre el milagro de las segundas oportunidades.

Estoy ante la reseña más difícil de los últimos meses porque este libro me ha dejado sin habla y a ver cómo os explico yo algo ahora jajaj.

Bueno como sabéis leo más bien poco de literatura juvenil, no por nada en especial, pero no suele llamarme, pero con este iba más que recomendada y me fié del criterio de Lesin, y joer vaya que si acertó, encima me lo regalaron por el amigo invisible y fue verlo y tener que leerlo.

Hay gente que dice que es lento, a ver rápido no hay y no busquéis acción, es lento porque es una delicia que lo sea, es genial cómo te envuelve la historia, cómo vas metiéndote en la cabeza de ambos personajes, ya que el libro está narrado en primera persona por Josh y por Nastya, alternándose la narración, y siempre indicándolo al inicio de cuando cambia el narrador, y además de ese detalle me ha encantado que al final cambie una cosita (no os digo cual lógicamente porque si no os destripo la intriga).

El libro tiene un punto de inicio, la llegada de Nastya al  nuevo instituto, cómo lo afronta, cómo ve a sus compañeros, para poco a poco ir conociéndolos, y cómo de primeras se fija en Josh ya que es un chico más bien extraño y callado. Es que todos los personajes que aparecen son adorables, y aunque al principio no lo parezcan os aseguro que con lo paso de las páginas os iréis enamorando de cada uno, a mi me robó el corazón en especial Drew, el mejor amigo de Josh, ligón empedernido, pero cuando lo conoces no puedes hacer más que quererlo. Es una majera de trabajar al personaje y su psicología que me ha dejado fascinada.

Después de ese punto de inicio irá avanzando la vida de Nastya pero también iremos descubriendo sus secretos, y la iremos comprendiendo por qué hace lo que hace y por qué se comporta así, porque puede que de primeras nos resulte irritante o desagradable, pero todo tiene una explicación, aunque si que es verdad que a mi desde primeras me pareció genial su personalidad, muy directa y fuerte, aunque bueno igual no todo es como parece.

El cómo vamos sabiendo las cosas me gusta, es despacio, sin que metan la información a presión, y teniendo sentido con la historia, lo que hace que nos asombre más, porque no lo ves venir. La pluma de la autora es sensible aunque la historia sea cruda, porque creedme que es cruda y duele en algunos momentos, pero nos hace pensar, nos hace ver que la vida es dura pero aunque no lo parezca continúa, que alrededor habrá gente así y lo supera o se estanca, pero de todos aprendemos y siempre encontramos gente maravillosa en quien apoyarnos (como es mi caso con Lesin <3).

A la historia de amor le pasa igual, no es amor a primera vista, es un amor que nace de la necesidad, del cuidado, del cariño, de sentir que esa persona es tu salvavidas, a lo que te anclarías pasara lo que pasara, y nos damos cuenta también que a veces a quien más queremos es a quien más daño hacemos sin quererlo o queriendo, pero todo en esta vida tiene solución y segundas oportunidades.

De verdad no dejéis de leerlo porque encima por si no fuera poco el final te deja llorando con una sonrisa, es lo más bonito que he leído en muchísimo tiempo