Maggie vive en una isla y regenta una casa de huéspedes...
Maggie tiene un huerto y casi siempre va descalza...
Maggie no quiere recordar por qué está allí; duele demasiado...
Maggie ha renunciado al amor y es complicado explicar los motivos...
hasta que conoce a Alejandro...
y la calma da paso a una tormenta de sensaciones...
y a la posibilidad de que tal vez sí se puede empezar de nuevo.
Maggie tiene un huerto y casi siempre va descalza...
Maggie no quiere recordar por qué está allí; duele demasiado...
Maggie ha renunciado al amor y es complicado explicar los motivos...
hasta que conoce a Alejandro...
y la calma da paso a una tormenta de sensaciones...
y a la posibilidad de que tal vez sí se puede empezar de nuevo.
¿Qué mejor manera empezar el verano que leyendo este libro? ¿Y qué mejor manera de poder releerlo que al sacar su edición Debolsillo? Si aún no has leído este libro de la autora, no sé a qué esperas. Y si aún no te has estrenado con la autora este libro es perfecto ya que es autoconclusivo.
Este libro ha vuelto a hacerme llorar sin parar ya que la intensidad que encontramos en sus páginas nos hace empatizar con los personajes de tal manera que hacemos nuestra la historia. Y he vuelto a devorarlo en poco tiempo, a pesar de ya conocer la historia.
Maggie creo que es el personaje femenino de Elisabet que más me ha sorprendido, porque es muy diferente. Al principio puede parecerse a las demás, pero según pasan las páginas vamos viendo cómo es, cómo cambia, y descubrimos algo que además de dejarnos con la boca abierta, nos duele, queremos ayudarla, queremos intentar arreglar eso que se rompió en ella y que no sabemos si se podrá arreglar. Elisabet ha metido en esta historia algo que no es muy usual y me ha encantado. Una explicación a por qué Maggie cambia así, por qué huye de todo, por qué tiene miedos, de dónde salen sus debilidades. Y es que encima ese cambio es lento y paulatino, te va envolviendo hasta que ves que no hay marcha atrás, que ha hecho todo aquello que cambiará su vida y ya no hay fácil solución.
Antes de hablaros de Alejandro, el protagonista masculino, os cuento que desde el principio la novela guarda misterio, porque sabemos que Maggie está en la isla huyendo de algo, y que Alejandro fue alli huyendo también de otra cosa. Pero no sabemos ni el pasado de ella ni el presente de él, todo es un misterio que lentamente nos van resolviendo y que hará que nos vayamos metiendo en la historia y enganchando sin remedio mientras ellos dos se conocen y descubren que podemos ser otras personas cuando el que está enfrente no conocemos quiénes somos realmente. Aunque luego todo acaba saliendo.
Qué decir de Alejandro. Es un hombre que parece una cosa y luego es completamente diferente. Tiene un trabajo que no pega con su personalidad, aunque debo decir que lo debe de hacer de maravilla por lo que se ve. Es tierno, paciente, amable, mira con los ojos de la verdad, es capaz de ver en la gente su realidad, sin todas esas máscaras que nos ponemos para aparentar ser lo que no somos. Aunque he de decir que en algún punto llegué a odiarlo, pero aún así creo que con calma y pausadamente me fue conquistando.
En este libro, uno de los personajes que me ha hecho reír un montón, y también preocuparme un poco ha sido la señora Mercedes. Con sus 70 años es quien hace compañia a Maggie y la ayuda a no perder el norte, pero es que esta señora tiene unos puntos que ya quisieran algunos jóvenes. Además he adorado que Maggie hiciera referencia a su abuela muerta, que la recuerde con cariño y añoranza, me ha puesto más sensible aún.
No os he comentado que está narrado en primera persona por Maggie, pero también hay algún capítulo narrado por Alejandro, y uno de ellos en concreto es de vital importancia para entender bien el final. Porque el final pufff pensé que iba a ser una cosa y cuando fue otra madre mía vaya llorera, pensé que no dejaría de llorar en toda la noche. Me ha encantado, me ha parecido real, nada forzado, todo natural, lo que debía pasar a nuestros dos protagonistas. Aunque si hubiera pasado lo que yo pensaba también lo hubiera entendido.
Una novela muy recomendada para esta época y que nos hará reír, llorar y soñar.
Tengo muchas ganas de leer algo más de esta autora ya que solo me he leído el de la magia de ser Sofía y me encantó así que a ver si poco a poco voy leyendo sus otros libros.
ResponderEliminarMe dejas un poco desconcertada porque lo he intentado leer un par de veces y no he sido capaz de avanzar con él.
ResponderEliminarBesos.
Lo leí el verano pasado y es de los que más me ha gustado de la autora. El más maduro para mi y con el que más me he identificado.
ResponderEliminarUn beso ;)
¡Hola!
ResponderEliminarQue bien que la relectura te haya gustado tanto otra vez :D
A mí esta autora no es de las que más me llaman la atención, porque siempre veo críticas un poco dispares de sus libros.
¡besos!
Tengo muchísimas ganas de volver a leer algo de la autora, y la verdad es que este libro tiene todas las papeletas para ser devorado este verano, sobre todo ahora que se ha publicado en edición de bolsillo *-*
ResponderEliminar¡Espero poder hacerme con un ejemplar muy pronto! :D
¡Besos!
A pesar de que me encanta Benavent todavía no he tenido oportunidad de leerlo, espero que de este verano no pase.
ResponderEliminarUn beso
No me termina de llamar esta vez.
ResponderEliminarBesotes!!!
Lo tengo en la estanteria pendiente de leer, a ver cuando le encuentro un hueco.
ResponderEliminarSaludos